Seguridad

¿Cómo lograr que los adolescentes se sientan seguros en las redes sociales?

La pasada semana, META anunció una novedosa sección de privacidad para proteger a los adolescentes que utilizan Facebook e Instagram de adultos con intenciones sospechosas. Las compañías están haciendo grandes esfuerzos para que la utilización de las redes sociales, y también los servicios digitales para adolescentes, sean seguros. En esta línea, Facebook ya bloquea la descarga de aplicaciones de realidad virtual inapropiadas, teniendo en cuenta la edad de los niños. Instagram, por su parte, presenta un centro familiar con la idea de ayudar a los padres a proteger a los pequeños que usan esta plataforma.

Otros consejos a tener presente

- Cuidado con los extraños.

Igual como sucede al hablar con extraños en la calle, la misma regla debería aplicarse en el mundo online. Es decir, resulta importante recordar a los menores que no deben compartir información personal alguna en redes sociales, que pueda facilitar a alguien localizarlo en la vida real. Hablamos de la dirección de casa, del nombre del colegio en el que estudian o de sus actividades extraescolares favoritas. Un buen ejemplo de lo que no hay que hacer: publicar una foto del equipo de fútbol en el que se juega, y dejar el nombre o la geolocalización en la foto.

- Incrementar la responsabilidad de la seguridad de los datos personales.

Resulta especialmente positivo promover que los adolescentes conozcan el sentido de la responsabilidad sobre los datos personales que usan en el espacio digital. Inclusive los nombres de usuario y las contraseñas. Para lograr protección completa, no deberían compartirlos con nadie. También deberían mantener estos datos en secreto. Naturalmente, los padres deberían conocer dicha información, pero todo ello no implica que también sea seguro compartirla con amigos u otras personas de su entorno. Las contraseñas siempre deben ser complejas y únicas. Al ser difícil recordar varias contraseñas, la mejor idea recae en hacer uso de una solución de almacenamiento y generación de contraseñas, como las de Kaspersky.

- Confiar en la tecnología digital, sin confiarse.

La iniciativa de META es, sin duda, un gran paso hacia la seguridad de los adolescentes en las redes sociales. Pero, simultáneamente, hay que recordar que tampoco se debe confiar en la tecnología sin sentido. Además, los propios adolescentes son responsables de los datos que utilizan online. Por poner un ejemplo, esto debería ser relevante para servicios como YouTube. Lo fundamental es que tanto el contenido del propio vídeo, como los mismos comentarios, no se asocien de ninguna forma con ningún dato personal.

- Confiar, pero también verificar.

Al comunicarse gracias a las redes sociales, los usuarios, incluidos los adolescentes, pueden llegar a intercambiar a menudo diferentes archivos y enlaces. Para conseguir garantizar que el proceso de comunicación sea seguro, sin dudar constantemente de si ese enlace dañará el ordenador personal, los adolescentes pueden usar múlitples soluciones de seguridad que les ayuden a identificar y también bloquear los enlaces de phishing. También las descargas maliciosas, protegiendo así su ordenador y sus datos personales.