Con Sage Control Horario es posible controlar eficientemente el nuevo modelo de trabajo híbrido y flexible

 

Con la llegada hace dos años del Real Decreto-ley de medidas urgentes de protección  social y de lucha contra la precariedad laboral en la jornada de trabajo, se obligó a las compañías a implementar de manera muy apresurada, mecanismos de registro de la  jornada laboral.
 

En este sentido, Diego Sánchez-Aparisi, Product Marketing Director en Sage, destaca “Ahora, la adopción progresiva de un nuevo modelo de trabajado híbrido y flexible impuesta por la pandemia y normativas como la Ley del Teletrabajo han vuelto a revolucionar el registro de jornadas”, Agregó Sánchez-Aparisi: “El mercado demanda  un  completo  software adaptado a la virtualización  de  las  relaciones  laborales,  compuesto  por múltiples realidades dentro de la empresa”.

 

Sage, líder mundial en soluciones de gestión empresarial en la nube, ha entendido esta nueva realidad y ha presentado el Sage Control Horario (SCH) 2.0. Basado en la plataforma del ISV Woffu, con más de 1.450 clientes de todos los sectores y dimensiones y más de 130.000 usuarios activos. Este es un software de gestión del tiempo totalmente renovado, y cuenta con dos ediciones: PRO y ENT con funcionalidades diferentes. Se comercializará de manera independiente o con la posibilidad de integración con los productos de laboral Sage 200 y Sage Despachos Connected.

 

 

La solución colaborativa incluye todas las nuevas funcionalidades que Woffu ha ido incorporando recientemente. La experiencia de usuario optimizada permite a los trabajadores realizar fichajes diarios, consultar turnos, obtener el detalle de las horas  realizadas,  informar sobre ausencias y solicitar días de vacaciones, entre otras, de manera  muy sencilla.

 

Por otro lado, responsables y managers pueden visibilizar en una única herramienta y en tiempo real la presencia o ausencia de los empleados, lo cual permite planificar las cargas de trabajo, agilizar sus respuestas y gestionar de manera eficiente las demandas del trabajo flexible y remoto.

 

De igual manera, los informes con métricas actualizadas sobre indicadores de gestión de personal, saldos de días de vacaciones o informes legales de horas trabajadas reducen de manera significativa posibles errores de interpretación, prevenir el absentismo no justificado y contribuir a una mejor comunicación interna.

 

 

Sage Control Horario no solo ayuda para controlar horarios y gestionar tiempos, sino para aumentar la productividad de los trabajadores, bien sea vía presencial o remota. Al ser posible gestionar las horas, asociada a la actividad de los equipos, se puede conocer el tempo dedicado a cada proyecto,

 

establecer pautas y rutinas y optimizar la colaboración al conocer la disponibilidad de los compañeros, todas estas funcionalidades sumamente útiles si se toma en cuenta que 2,8 millones de empresas españolas están sujetas a normativas de control horario y teletrabajo. “Sin embargo, el registro horario genera conflictos laborales  en  una  de  cada cuatro pymes por discrepancias en su aplicación. Sage Control Horario no sólo aporta la transparencia y rigor necesarias, sino que ayuda a cumplir con la normativa con total confianza”, explica Sánchez-Parisi.

 

El sistema de fichaje digital es muy sencillo para los trabajadores, ya que pueden acceder a el desde sus dispositivos móviles mediante la descarga de la App o desde la aplicación web para cualquier PCs y tablets.

 

Este software está certificado por el estándar de seguridad ISO 27001 que no requiere inversiones de hardware, es integrable con terminales de fichaje (tarjeta, biometría, reconocimiento facial…) y permite creación ilimitada de horarios fijos, flexibles o rotativos, digitalizando los flujos de trabajo con gran facilidad.

 

“La coexistencia de trabajadores remotos con empleados presenciales genera nuevos retos de gestión. Una aplicación centrada en la gestión del tiempo, pero colaborativa y productiva, es la mejor solución para llevar un control horario y de presencia más preciso sin que suponga una sobrecarga de trabajo y recursos”, concluye Diego Sánchez-Aparisi.